El anuncio de la Lotería de Navidad 2014 ha hecho correr ríos de tinta (y numerosos “memes”), aunque como afirma Miguel Roig en Fronterad, la campaña de este año sí que ha constituido “un gran relato” para vender un sorteo en el que, la lotería deja de ser un juego de azar para convertirse en un elemento compartido de distribución y de solidaridad, a partir de la creación de emociones compartidas. Y continua “Loterías se apropia del capital simbólico que vienen acumulando las organizaciones y las plataformas sociales que han surgido para proporcionar amparo ante los desahucios, los excesos y los atropellos de la banca y los recortes de derechos de todo tipo”, para terminar uniéndolo a otro relato el de la “indignación”.
Todos ellos, estos relatos, están construidos a través de spots publicitarios que narran historias para desarrollarlos, generando una serialidad argumental: el primer spot y más conocido, la solidaridad del dueño del bar con el cliente al que le “guarda” un décimo premiado a pesar de no haberlo adquirido en su momento; el segundo, el spot en que un empleado bancario y ganador de la Lotería, a la vez que evidencia el papel de los bancos y entidades financieras. Y, en el tercero, gracias a la lotería se desbarata un desahucio (concretamente, el del dueño del bar) frente a un implacable hombre de negocios.
Anuncio Lotería de Navidad 2014-Historia completa
Además, asociado a la campaña publicidad visual (televisiva e internet, con gran éxito viral) se ha completado con una iniciativa de relatos relacionados con las historias de la lotería www.elbardeantonio.com.